Perder y Ganar

El dieciocho de Octubre se celebró el Día Internacional de la Menopausia, y después de haber leído varios artículos en prensa, no he podido menos que sentirme un poco «asustada» con tanto aspecto negativo. Pero mirando un poco hacía atrás vienen a mi memoria muchas mujeres, mujeres de mi entorno, de mi familia, mis abuelas, mi madre, mis amigas ; mujeres todas ellas fantásticas. Después de pensar en ellas soy más optimista.

Yo no creo que la menopausia sea una etapa negativa, no es una enfermedad, es simplemente una transición. Cada etapa de nuestra vida tiene sus pérdidas y sus ganancias, y por el hecho de que ya no nos podamos quedar embarazadas no debemos sentirnos menos importantes, es más, somos más libres. Nos queda un tercio de nuestra vida y debemos vivirla en plenitud.

En estos momentos de la vida disponemos de más energía psíquica que en cualquier otra época anterior y, si nos esforzamos en usar esa energía, nos REINVENTAREMOS como mujeres más fuertes y sanas. Es una época de cambios, ¡como no!, y como cualquier cambio puede provocar ciertos temores, por lo que debemos estar informadas y preparadas. Es posible que disminuya nuestra ansiedad respecto a estos cambios si sabemos que forma parte de una transición normal y natural. No olvidemos que hay mujeres que rara vez experimentan algún síntoma de menopausia. No sabemos lo que tenemos escrito en nuestro «guión», si no es bueno siempre se podrá reescribir, tenemos muchas herramientas.

Me acuerdo de mis abuelas Ethel y Pepa, unas mujeres fuertes, alegres, llenas de vida y que se pasaban la vida trabajando de sol a sol, tanto en el campo como en casa.

La abuela Ethel, por ejemplo tuvo su primera hija a los diecisiete años, y el último de sus siete hijos a los cuarenta . Yo no creo que hubiese  llegado a los noventa y tres con aquella salud física, mental y emocional que yo recuerdo si no hubiera hecho los ajustes necesarios al llegar a la edad madura.

Está claro que en la edad madura aumentan las enfermedades graves, pero no se pueden atribuir solamente al hecho de  envejecer. Están causadas en parte por las tensiones y problemas de relación no resueltos durante la crianza de los hijos y, después durante la menopausia ; y que se han ido desatendiendo por no atrevernos a cambiar las cosas. En estos momentos de la vida tenemos la energía suficiente y creo que es el momento de resolver viejos problemillas (posos) que hemos ido posponiendo y fijar nuevas normas para los años venideros. Si logramos hacer esto, entonces nuestra relación de pareja nos ayudará a prosperar en la última etapa de nuestra vida.

¿Tenemos mala circulación?

Ahora que ya hace frío nos puede apetecer acercarnos a una fuente de calor directo como braseros, estufas o radiadores pero debemos evitarlo para que no se produzca un empeoramiento de las varices. El calor produce ensanchamiento de las venas (vasodilatación),  que hace que se hinchen (edemas) y dificulta la circulación de retorno.

Sin embargo la aplicación de frío es beneficiosa, por que ejerce el efecto contrario (vasoconstrición).  Es conveniente terminar la ducha alternando un chorro de agua fría y otro de caliente. El último siempre frío.

Poner las piernas un rato en alto al final de la jornada y un masaje desde los tobillos hasta las rodillas y de ahí a las ingles como si estuviéramos arrastrando agua,  con un gel frío (si no nos apetece porque estamos en Otoño, que sea normal ). Nuestras piernas nos lo agradecerán.

Durante el día os recomiendo usar unas medias (hay también calcetines y pantys) de compresión fuerte o media, sobre todo para los que estamos todo el día de pie.  Podemos aplicar el gel frío encima de las medias. No es recomendable cruzar las piernas cuando nos sentemos.

No me puedo olvidar del ejercicio físico, nadar, bicicleta … que nos viene fenomenal. En cuanto a la dieta, que sea rica en fibra y pobre en sal.

Los comprimidos a base de castaño de Indias ayudan a activar el riego sanguíneo. Reducen el dolor, bajan la inflamación y alivian el  típico picor que aparece en la zona de los tobillos.

 

Seguimos con las mascarillas

Hoy os voy a hablar de nuevo de las mascarillas faciales, ese gesto mágico que tanto nos gusta  y que tan bien nos sienta,  tanto a nosotras como a ellos (haz que la pruebe tu pareja y verás).

La mascarilla reafirmante antiarrugas de Ophycée con extracto absoluto de algas azules y con un efecto lifting que se nota nada mas aplicarla es una de mis preferidas.Estas algas azules son muy interesantes, os contaré algo de su historia:

. En 1962 dos investigadores observan una cicatrización completa y rápida de las heridas mediante la regeneración de la piel tras la aplicación de un cataplasma de algas azules.

. En 1984 se empieza a usar el alga para combatir el envejecimiento de la piel .

. En 2012 se consigue el 1º extracto absoluto de algas azules para el uso cosmético.

 

Desde hace 30 años los investigadores estudian los mecanismos fisiológicos responsables de la extraordinaria longevidad de las algas azules, se supone que viven en el planeta desde hace mas de 3500 años; ¡casi nada! Así que deciden sacar beneficio de sus bondades. Las algas azules que crecen en Marruecos estimulan la renovación celular y la producción natural de elastina y colágeno con un poder antioxidante y rejuvenecedor excepcional. Un alga milenaria que desafía el paso del tiempo, capaz de realizar la fotosíntesis.

 

Nos aplicaremos la mascarilla por la noche, después de la obligada limpieza, poniendo una capa generosa. Si pasados diez minutos vemos que sobra algo, retiramos con un pañuelo, nunca aclarar. Si nuestra piel necesita un cuidado extra porque está muy seca, porque queremos hacer una regeneración mas completa o porque estamos en esa época de cambios hormonales , podemos aplicar un poquito de aceite de argán o una buena regeneradora de noche.

Su textura es aterciopelada y ligera, aporta confort y frescura, ¡os encantará! Por la mañana la piel estará regenerada y los rasgos descansados. Podemos aplicarla una o dos noches a la semana o cuatro-cinco días seguidos cuando la piel necesite un cuidado «extra».

 

Los S.O.S para las manchas

Como ya os he comentado ahora es el mejor momento para despigmentar esas manchitas que nos han salido en cara, cuello, escote o manos. Vamos a aprovechar que el sol está mas flojito (la protección es obligatoria), para ponernos manos a la obra.

Lo que no debemos olvidar:

  • Si nos echamos colonia o perfume en la piel y nos da el sol estamos consiguiendo una mancha segura. Vemos muy a menudo gente con manchas en el cuello debido a esta práctica , o sea que vamos a empezar a despigmentar cuanto antes y a cambiar el hábito,  nos perfumaremos en zonas más escondidas o en la ropa.
  • La piel del escote es muy sensible y tiene menos protección frente al sol, por lo que tenemos que tener especial cuidado. Ahora es el momento de aplicar un buen regenerador y el despigmentante.
  • A veces nos olvidamos de las manos y ahí están recibiendo las agresiones del sol en todo momento, (en los bolsillos pocas veces las llevamos). Ahora es el momento de aplicar una despigmentante por la noche, e hidratar y proteger por el día (en Vitoria los guantes obligatorios desde ya). 
  • Si estas embarazada, no olvides la hidratación  y la protección solar. Renovar a mediodía sobre todo la zona de alrededor de los labios en la que puede aparecer la antiestética mancha. ¡ No es el momento de despigmentar !.
  • Si tenemos una mancha genética no debemos aplicar despigmentantes.

Con una utilización regular y protección solar diaria tendremos resultados seguros.

Para las pieles muy sensibles,  o despues de tratamientos fuertes estoy viendo buenos resultados con  AVÉNE-D PIGMENT , se aplica por la noche en cara, cuello, escote y por supuesto en las manos.