Seguimos repasando las causas más frecuentes de alergia.
- Polvo: los ácaros del polvo originan muchísimas alergias en nuestro pais. Estos
microscópicos y feísimos insectos viven gracias a nuestras células muertas y están en los armarios roperos, colchones etc. Os cuento una anécdota : yo me pongo malísima cuando limpio y ordeno los armarios en los que hay ropa, enseguida tengo que cambiar de ambiente y eso que utilizo un paño húmedo y otro seco y me lavo las manos a menudo.
- Animales : los alergénos provienen de la saliva, el pelo, la orina, plumas y escamas. El contacto con los animales hace que se desarrollen las alergias por lo que cada vez son más.
- Pólenes : Los síntomas de la alergia aparecen cuando los niveles de polen aumentan. En marzo y mayo es cuando más hay provenientes, sobre todo, de cipreses, plátanos (árbol) y plantas gramíneas. Debo recordar que el polen no es un fenómeno exclusivo de la primavera. Si somos alérgicos no debemos olvidar el inhalador.
La prevención más eficaz es evitar el alérgeno, pero a veces es imposible. Existen tratamientos muy eficaces para aliviar los síntomas, como , por ejemplo, antihistamínicos, corticoides, vacunas etc.
Los antihistamínicos por vía tópica, los que se aplican directamente en la mucosa nasal o en los ojos, alivian los estornudos y el picor bastante rápido. También están disponibles en sprays, comprimidos, jarabes y cremas.
Debo recordar el efecto fotosensibilizante de muchos medicamentos, antiinflamatorios, antibióticos, tanto al aplicarlos en la piel como al tomarlos. Si debemos aplicarnos una crema antiinflamatoria, por ejemplo, no nos debe dar el sol (la daremos por la noche). Hay alergias cutáneas que sólo se producen cuando estamos al sol. Algunas plantas pueden ser responsables, pero también los filtros que contienen algunas cremas. En la farmacia os ayudaremos a distinguir y a acertar.
El riesgo de una reacción alérgica por picaduras de avispas y abejas aumenta durante los meses de verano. Por eso, los alergólogos recomiendan extremar la precaución al aire libre y evitar, en la medida de lo posible, realizar comidas en el campo y perfumarse.
Hay que tener cuidado con la limpieza en las casas que llevan tiempo cerradas. Lo ideal es limpiarlas antes de que lleguen los alérgicos.