La piel es el espejo de lo vivido

La piel es el espejo de lo que hemos vivido y como lo hemos vivido. La exposición al sol, los hábitos alimenticios poco correctos, el tabaco, el alcohol, la disminución de la producción de estrógenos, como gestionamos el estrés, los cambios de peso, la expresión diaria e incluso nuestra postura al dormir … todo hace que envejezcamos mal o antes de tiempo.

A medida que pasan los años, la piel cambia y va envejeciendo, pero cómo lo haga 253351_604903612867000_2092058118_ndepende mucho de nosotros. Cuidarse desde joven, mostrará los resultados de mayor. Si somos constantes con una rutina sana la piel estará más flexible, firme y, por supuesto, sin manchas.

A lo largo de todos estos años detrás del mostrador, observo que quien se ha cuidado está recogiendo lo sembrado, frente a personas que tienen la piel mucho más envejecida ya que no se han preocupado nunca de cuidarla y, aparte de vérsela flácida y deshidratada, notan falta de confort.

Una piel deshidratada no tiene buen aspecto, tengamos la edad que tengamos, pero si ya hemos cumplido los 50 el problema se agrava con la caída de producción de hormonas. Los estrógenos, encargados de transmitir señales estimulantes a las células, bajan su producción con lo cual la piel se modifica. Vemos un rostro frágil, deshidratado y desnutrido. En la dermis disminuyen las fibras de sostén y la cantidad de ácido hialurónico (que hidrata, a tope).avene-cuidado-facial-proteccion-solar-akerat-agua-termal-hombre

Pero no nos rindamos, la cosmética puede hacer mucho y lo sabemos.

Después de todos estos años en la farmacia, no tengo ninguna duda.